ExpertoPerroscomida¿Los perros pueden comer naranja y otras frutas cítricas?

¿Los perros pueden comer naranja y otras frutas cítricas?

Existen algunas frutas que tienen cierto impacto (positivo o negativo) en el metabolismo de los animales. El caso de los cítricos es positivo solo en algunos casos. La interrogante sobre si los perros pueden comer naranja es una de ellas.

Es un hecho que, para los seres humanos, una dieta rica en frutas aporta una gran cantidad de beneficios a nuestra salud.

Por esta razón, muchas personas deciden añadir en la dieta de sus mascotas frutas. Sin embargo, la fisiología y el metabolismo de los animales difieren notablemente del de los seres humanos, por lo que nuestras dietas deben ser distintas.

Así que, ¿qué ocurre con frutas como la naranja? ¿Son beneficiosas para nuestras mascotas? ¿Son perjudiciales? En este artículo daremos respuesta a estas preguntas, enfocándonos específicamente en si los perros pueden comer naranja.

La como propone Rocio Kalenok, la naranja es, sin lugar a duda, una fruta de grandes propiedades para el organismo, con abundancia en vitamina C. La naranja es una de las frutas más consumidas alrededor del mundo. Son conocidas sus propiedades en cuanto a vitaminas y aportes nutricionales, y su sabor es refrescante y delicioso.

A continuación, te explicaremos si los perros pueden comer naranja y qué pasa cuando se incluye este cítrico en su dieta.

¿Los perros pueden comer naranja y otras frutas?

La respuesta a si los perros pueden comer naranja y otras frutas es sí. Sin embargo, debemos ser cautelosos con esta afirmación. Por su metabolismo y características biológicas, la relación de los perros con las frutas es particular. No todas las frutas son buenas para los perros. Algunas, como la uva, son perjudiciales para ellos.

Por su parte, la naranja les sienta bien a los perros siempre y cuando la coman en cantidades pequeñas. Las frutas, para los perros, no pueden constituir la parte fuerte de su alimentación diaria. Este rol les corresponde a las carnes y el pescado, alimentos capaces de aportar proteínas. Las frutas como la naranja sirven, más bien, como complementos a su dieta.

Esto quiere decir que los perros pueden comer naranja y otros cítricos como la mandarina en forma de premio. La naranja no debe constituir más del 15% del menú diario de tu mascota.

Si decides darle naranja a tu perro, es importante que la peles correctamente, sin dejar trozos de la cáscara. Asegúrate de que la naranja esté fresca y que su sabor sea agradable. Para que a tu perro le sea fácil comerla, córtala en gajos y recuerda extraer las semillas.

¿Son buenos los cítricos para los perros?

Los perros pueden comer naranja para beneficiarse de algunas de las propiedades que esta fruta, así como otros cítricos, presentan. Entre las ventajas que aporta el consumo de naranjas para nuestros amigos caninos, encontramos:

  • Fortalecimiento del sistema inmunológico: las naranjas son ricas en antioxidantes, algo de lo que carecen las comidas procesadas. Los antioxidantes ayudan a fortalecer el sistema inmunológico, un punto muy positivo para perros en crecimiento.
  • Aporte importante de vitamina C: los perros suelen sintetizar esta vitamina por sí mismos. Sin embargo, añadir esta vitamina a su dieta a través del consumo de naranjas tiene varias ventajas. Entre ellas, la cicatrización y cura de lesiones y la absorción de hierro.
  • Mejora la hidratación: en días calurosos, la naranja es un buen alivio para las altas temperaturas. Además, ayuda a prevenir la aparición de cálculos en los riñones de nuestras mascotas.
  • Mejora de la digestión: gracias a la cantidad de fibra que aportan los cítricos, y aportan calcio y proteínas suplementarias.
  • Aporta, además de vitamina C, otras vitaminas: B1, B2 y E.
  • Prevención de enfermedades: ayuda a prevenir anemias, hipersensibilidad y hemorragias de distintos tipos, hipertermia, estomatitis ulcerosa y otros trastornos causados por la falta de vitamina C.

Hacemos hincapié en el gran aporte de vitamina C con los frutos cítricos. Según María Besteiros, experta animal, comenta que la vitamina C es fundamental en los perros. Ayuda a la reconstrucción de tejidos, es un antioxidante y previene enfermedades.

¿Los perros pueden beber alguna bebida con base de naranja?

Como ya hemos visto, los perros pueden comer naranja y otros cítricos en trozos. Pero, ¿qué ocurre con otras formas de presentación de la naranja, como los jugos? Cuando exprimimos la naranja para obtener jugo, la fruta pierde algunas de sus propiedades, como la fibra. Como mencionaos anteriormente, la fibra es una de las ventajas que aporta la naranja a la salud de nuestro perro.

Otro punto en contra tiene que ver con que, al exprimirse, la naranja se vuelve más difícil de procesar en la sangre. ¿Qué quiere decir esto? Que los azúcares de la naranja pasan con más rapidez a la sangre y se convierten en grasas. Estas grasas son un factor que favorece el sobrepeso.

Debido a esta razón, no es aconsejable darle a nuestro perro ninguna fruta en jugo o en otra presentación que no sea entera. A pesar de que los perros pueden comer naranja, es probable que la rechacen por su olor. Si esto ocurre, no trates de darle bebidas con base de naranja; la mejor opción es recurrir a otra fruta.

La falta de vitamina C en la dieta canina

No es una novedad que la vitamina C es muy necesaria en el organismo (tanto de humanos como perros) para prevenir enfermedades y subir defensas. Ahora, un perro con sus defensas bajas puede contraer ciertas enfermedades y condiciones.

La falta de vitamina C suele causar que el perro presente los síntomas de los siguientes:

  • Anemia y debilitamiento del cuerpo.
  • Hipersensibilidad.
  • Fiebre y malestar general.
  • Sangrado nasal y debilitamiento de las encías.
  • Hemorragias en el ojo y la retina.
  • Hemorragias articulares.

Por último, también pueden desarrollar enfermedades a largo plazo que afecten al hígado y los intestinos. Estos son los órganos que generan la vitamina C en sus cuerpos. Por lo cual, la falta de dicha vitamina, acarrea consecuencias posteriormente.

En conclusión, está más que claro que los perros deben tener como complemento tal vitamina para su correcto desarrollo, crecimiento y fortalecimiento.

¿Qué opinan los veterinarios al respecto?

Al igual que con otras frutas, los veterinarios opinan que los perros pueden comer naranja siempre que sea con moderación. Aconsejan darles a nuestras mascotas porciones pequeñas y que el consumo de esta fruta no sea diario.

No solo eso, apuntan que los animales, y en especial los perros, son especies que pueden generar vitaminas y proteínas por ellos mismos. Esto significa que la naranja y mandarina debe solo ser complementos. El exceso de tal vitamina afecta el organismo canino.

Más allá de esto, los expertos señalan algunas advertencias que debemos tener en cuenta:

  • El exceso de vitamina C puede ser perjudicial. Cuando hay exceso de vitamina C, esta se elimina en la orina. Sin embargo, esto tiende a acidificar la orina. Este exceso puede generar, además, diarreas y otros trastornos digestivos.
  • Puede ocurrir que tu perro sufra de una carencia de vitamina C que requiera de suplementos. En este caso, añadir naranja u otros cítricos a la dieta de tu mascota no será suficiente. Deberás consultar al veterinario, quien le recetará algún suplemento acorde a sus necesidades, edad, tamaño, etc.
  • Si observas que el consumo de naranja le produce a tu mascota algún efecto desfavorable, suspéndela de su dieta inmediatamente. Si estos efectos persisten o empeoran, deberás consultar al veterinario de manera inmediata.
  • Para introducir la naranja en la dieta de tu perro, debes hacerlo paulatinamente para evitar complicaciones de tipo digestivo. Si a tu perro no le gusta, lo cual puede deberse al olor o al sabor ácido, prueba otras alternativas, como la mandarina.

Conclusiones generales en torno a la naranja y perros

Ahora que sabes que los perros pueden comer naranja y beneficiarse de los atributos que ofrece esta fruta, puedes tratar de incorporarla. Eso sí, es fundamental que sigas nuestras recomendaciones y se la ofrezcas con moderación, en cantidades pequeñas y no más de tres veces por semana.

En la variedad está el gusto. Si ves que tu perro rechaza las naranjas, no te preocupes. Los caninos son particularmente sensibles al olor de las naranjas, mandarinas, toronjas y otros cítricos. Lo que debes hacer es ir probando con otras frutas. Seguramente a tu mascota le encantará otra variedad de fruta. Las manzanas, la piña y la sandía, por ejemplo, suelen ser frutas muy populares entre las mascotas.

El equilibrio es la clave de todo. Si bien los perros pueden comer naranjas y otras frutas, esto no quiere decir que estas puedan suplantar otros alimentos. Las proteínas de las carnes y el pescado o de los suplementos para perros son la parte esencial de su dieta.

El rol de la naranja, por ejemplo, va a ser complementar algunos aspectos que, en cambio, las comidas procesadas desatienden. Entre estos, el aporte de antioxidantes, la hidratación y la fibra son un plus que las frutas le darán a la salud de tu mascota.